Si la oficina está en la casa, no hay que mezclar los ámbitos. La documentación doméstica ( cuentas, etc.) y la documentación corporativa deben estar separadas. También debe haber distintos teléfonos incluidos sus números. Si se trabaja desde la casa, hay que hacer una entrada simbólica al espacio laboral, de no existir una real, por medio de una cortina o un biombo que se "abra" cada mañana, sin olvidar "cerrarlo" al termino de cada jornada. " La Cosecha Dorada", Sylvia Galleguillos.